martes, 30 de junio de 2015

El terrorismo financiero contra Grecia.


Vicenç Navarro

Catedrático de Ciencias Políticas y Políticas Públicas. Universidad Pompeu Fabra, y ex Catedrático de Economía. Universidad de Barcelona

Estamos hoy viendo un ataque frontal del capital financiero, hegemonizado por el alemán, y vehiculado primordialmente a través del Banco Central Europeo (BCE), en contra del pueblo griego, ataque que intenta evitar cualquier atisbo de rebelión frente a las políticas de austeridad que están destruyendo el bienestar de las clases populares de todos los países de la Eurozona y muy en particular de Grecia, cuyo gobierno Syriza ha sido el primero en decir “BASTA YA” frente a lo que no hay otra manera de llamarlo como terrorismo financiero (ver el libro del Profesor Juan Torres y yo, titulado Los amos del mundo, las armas del terrorismo financiero). Es en estos momentos cuando hay que entender el contexto político e histórico de lo que está ocurriendo, comenzando por las semejanzas existentes entre lo acontecido en Grecia ahora con lo que sucedió en España en el año 1936.

España 1936, Grecia 2015

Existen momentos en la historia de Europa en los que la lucha por la justicia social y por la democracia en un país es también la lucha por la justicia y por la democracia para todos los países del continente europeo. La lucha, mal llamada Guerra Civil en España (entre 1936 y 1939), fue un ejemplo de ello. En el territorio español, un golpe militar en nombre de las minorías que controlaban el país, tuvo lugar el 18 de julio del año 1936, con el apoyo de las tropas nazis alemanas y fascistas italianas, frente a la gran mayoría de las clases populares de los distintos pueblos y naciones de España, que resistieron tal golpe heroicamente durante más de tres años, con escasa ayuda militar de los países gobernados por partidos que se autodefinieron como demócratas, mostrando una gran traición a los principios democráticos que decían sostener.

La derrota de las fuerzas democráticas españolas significó también la derrota de la democracia en la Europa Occidental con la victoria del nazismo y del fascismo en muchos países de aquella Europa, iniciándose la II Guerra Mundial. Y en España, aquella victoria significó el inicio de un régimen dictatorial que se caracterizó por su enorme brutalidad (por cada asesinato político que cometió Mussolini, el dictador Franco cometió 10.000, según el mayor experto en el fascismo europeo, el profesor Malefakis, de la Universidad de Columbia en la ciudad de Nueva York) y que impuso un enorme retraso económico, político, social y cultural en España. En 1936, España e Italia tenían semejante nivel de desarrollo económico. En 1978, fecha en la que terminó aquel horrible régimen dictatorial, el PIB per cápita español era solo el 62% del italiano. Este fue el coste económico de tal régimen.

¿Qué está pasando en Grecia?

Salvando las diferencias que existen en cada hecho histórico, lo cierto es que en Grecia hemos estado viendo una situación semejante, en que la lucha por la justicia social y por la democracia en aquel país es la lucha por la justicia social y por la democracia en todos los países de la Europa Occidental. La pervivencia de la justicia social y de la democracia en los países de la Unión Europea se está jugando hoy en aquel país. Su derrota limitará enormemente, hasta anularlas, tanto la una como la otra, completando un proceso que se inició hace años con la construcción de un sistema de gobierno de la Eurozona, dominado por el capital financiero (hegemonizado por el alemán), que, en una coalición de las minorías gobernantes en cada país, han estado agrediendo al pueblo griego, destruyendo el 25% de su riqueza nacional o PIB, con el desmantelamiento de su ya escaso Estado del Bienestar, saqueándolo, robándole sus propiedades y atacando a sus clases populares, y muy en particular a su clase trabajadora, asalto que se ha estado realizando en colaboración con las élites corruptas y antidemocráticas que han gobernado Grecia durante muchísimos años. Este ataque (y no hay otra manera de definirlo) se ha llevado a cabo en alianza con las minorías que representan a las clases dominantes de los países miembros de la Unión Europea, siendo un aliado importante en esta lucha de clases que está teniendo lugar a nivel continental, las élites corruptas gobernantes del Estado español, herederas de las que dominaron la dictadura fascista en España.

La rama política de este capital financiero –los partidos conservadores y liberales, con la inestimable ayuda de los partidos socioliberales- (que todavía tienen la osadía de autotitularse socialdemócratas, tras haber abandonado cualquier atisbo de parecerse a tal tradición política), han establecido una dictadura en la Unión Europea que ha estado imponiendo políticas sumamente impopulares que carecían de mandato popular (pues no estaban en sus programas electorales), alcanzando su máximo desarrollo en Grecia. Hoy, la riqueza destruida en aquel país, todavía pobre en Europa, es mayor que la riqueza destruida en Francia y en Alemania durante la I Guerra Mundial. Sus pensiones y sus servicios públicos del Estado del Bienestar están siendo diezmados, y los convenios colectivos que defienden al mundo del trabajo están siendo enormemente debilitados, todo ello como consecuencia de las políticas neoliberales impuestas por el establishment neoliberal europeo que controla el gobierno de la Unión Europea y de la Eurozona, con la asistencia del Fondo Monetario Internacional. Es un ejemplo más del terrorismo financiero que es tan dañino como el terrorismo militar, y que es mucho más extenso.

El objetivo político del establishment europeo es destruir cualquier rebelión frente a esta d¡ctadura financiera

Lo que está ocurriendo hoy es el intento de destruir a Syriza, el primer gobierno que, representando los intereses de las clases populares, ha intentado parar tanta barbarie, rebelándose frente a las políticas públicas de austeridad, tal como le mandó el pueblo griego. Como he indicado en artículos anteriores, lo que la dictadura financiera quiere es no expulsar a Grecia del euro, sino expulsar a Syriza del gobierno. Y cuenta para ello con la clase política griega, corrupta hasta la médula, que controla la gran mayoría de los medios de información y persuasión de aquel país, como también ocurre en España.

Grecia ha sido la mayor víctima de este sistema terrorista que se está aplicando en la Eurozona, causando el mayor desastre social que se conoce en la Europa Occidental desde 1945. De ahí la urgencia y necesidad de ayudar a las fuerzas democráticas griegas, saliendo a la calle, enfrente de las delegaciones de la UE en España, para mostrar el rechazo hacia este terrorismo. La Europa que era el sueño de la resistencia antifascista durante los años de clandestinidad es ahora, una pesadilla, como consecuencia del deterioro tan marcado de la democracia y de la solidaridad, resultado de aquel terrorismo financiero que domina hoy este continente.


¿Qué está pasando en estos momentos?

Como era de esperar, la mayoría de los medios de gran difusión en España, altamente financiados por el capital financiero, han responsabilizado de lo que está ocurriendo nada menos que a la víctima de tal terrorismo. Frente a tanta mentira, es importante señalar:

1. La enorme necesidad y urgencia de responder a tanta falsedad, denunciando a los medios por falsificar la realidad, tanto de lo que ha estado ocurriendo como de lo que ha pasado estos días.

2. Que el Banco Central Europeo (BCE), que ya mostró su hostilidad hacia el gobierno Syriza solo dos días después de ser elegido, ha amenazado con destruir el sistema bancario griego cerrando toda transferencia a sus entidades bancarias.

3. Que las exigencias de las Instituciones Europeas (formado por, además de lo que se había llamado la Troika –el BCE, la Comisión Europea y el FMI-, el Eurogrupo), que incluyen el pago de la deuda, son un ataque frontal a la supervivencia de Grecia, pues es imposible que se pague tal deuda y a la vez reactivar la economía griega. Tales demandas han llegado a niveles escandalosos, como exigir que haya una reducción de las pensiones públicas que signifique un recorte equivalente a un 1% del PIB, a la vez que las mismas instituciones se oponen a la demanda de Syriza de aumentar los impuestos a las clases más pudientes, vetando también un gravamen a los grandes yates de tales clases.

4. Que la aplicación de las políticas de austeridad ha causado un auténtico desastre social y económico, generando a la vez un aumento y no una disminución de la deuda pública, de la cual solo se han beneficiado los bancos extranjeros, y muy en particular los alemanes y franceses, pero también los españoles.

5. Que cuando estos bancos estuvieron en riesgo de perder sus enormes beneficios generados por los intereses que Grecia estaba forzada a pagar, y que no podría pagar, fueron los gobiernos de la Eurozona los que les rescataron, bajo la falsa excusa de que intentaban ayudar a Grecia.

6. Que han sido las instituciones del establishment europeo, que desde el primer día del gobierno Syriza mostraron una enorme rigidez, las que han ignorado las demandas de este gobierno, que no eran ni más ni menos las que se habían permitido al Estado alemán cuando su deuda le estaba ahogando. En estas condiciones se hizo una quita de un 50% de la deuda pública alemana y se condicionó el pago del resto de la deuda al crecimiento de la economía alemana. Las instituciones del establishment europeo sistemáticamente se opusieron, e incluso se negaron, a considerar esta alternativa que había señalado el gobierno Syriza.

7. Que el BCE, en alianza con la clase corrupta dominante en Grecia, que controla la mayoría de los medios de información, está intentando que estos días, antes del referéndum del próximo fin de semana, haya un caos en la situación financiera griega, a fin de movilizar la oposición al gobierno Syriza en el referéndum, con la intención de conseguir lo que siempre desearon, echar a Syriza del gobierno.

8. Que la derrota de Syriza será una derrota de la lucha contra la austeridad en la Eurozona. Syriza no tenía ninguna otra alternativa a hacer lo que ha hecho, pedir la opinión del electorado griego, pues Syriza fue escogido para terminar con las políticas de austeridad. Si las instituciones europeas no le dejan hacer lo que prometió es una muestra más de su compromiso y coherencia democráticos el que Syriza considere necesario pedirle al pueblo griego que decida si acepta los cambios sugeridos por el establishment europeo o si desea que el gobierno desobedezca tales propuestas.

9. Que todo lo que está pasando en Grecia afecta directamente a las clases populares de todos los pueblos y naciones de España. De ahí que el gobierno Rajoy haya sido el mayor aliado en el Eurogrupo, del Ministro de finanzas alemán -el halcón del Eurogrupo-, pues dicho gobierno español ha sido de los que han llevado a cabo tales políticas de austeridad con mayor dureza, presentándose como el modelo a seguir en la Eurozona. El tsunami político ocurrido en este país en las últimas elecciones municipales ha asustado a ese establishment neoliberal que gobierna la Eurozona, contribuyendo a aumentar su rigidez negociadora, pues quieren, por todos los medios, que Syriza fracase. Intentan así asustar a la población española, cada vez más asqueada con las políticas neoliberales promovidas por el establishment español (y aquí en Cataluña, por el establishment catalán) y sus medios de información y persuasión. El miedo es, una vez más, la estrategia seguida por la estructura de poder ante el número creciente de ciudadanos que quieren tomar el control de su presente y futuro. De ahí el enorme temor de que la ciudadanía sea consciente de que se pueden cambiar las realidades que le oprimen si se organiza para ello. Y esto es lo que el establishment neoliberal europeo no puede permitir. Así de claro.

lunes, 29 de junio de 2015

La banalidad del mal.


Carlos F. Barberá

Hay un cuento no muy conocido de Mark Twain titulado “El hombre que corrompió Hadleyburg”. Narra la historia de un pequeño pueblo, orgulloso de la honradez de sus ciudadanos, a los que un hombre se propone corromper. Y lo hace, sin dejar uno solo.

Me volví a acordar de ese relato con motivo de la historia de las tarjetas black y antes en relación con los repetidos y redundantes casos de corrupción. De modo que me ha dado por hacer una pequeña reflexión sobre el origen del mal.

Se dirá que es un tema excesivamente complejo y que los ejemplos aducidos no están a su altura. Veremos.

El final de la Segunda Guerra Mundial y el descubrimiento del alcance y los métodos del Holocausto llevaron a Hannah Arendt a declarar en 1945: “El problema del mal será la cuestión fundamental de la vida intelectual de Europa de posguerra”. Parece que ese pronóstico sólo se ha cumplido a medias. Ciertamente hay una reflexión en curso –en gran parte en la teología católica– sobre la autoridad de las víctimas y sobre el papel de una moderna teodicea pero no directamente sobre el mal. Acaso es que ya se ha clausurado el tiempo de la reflexión metafísica.

En la tradición filosófica europea suele hacerse una referencia a Kant y a su concepto de “mal radical”. El ser humano tiene una tendencia al bien, a seguir los dictados de la razón. Pero tiene también una propensión contingente a determinarse por motivos diferentes al solo respeto a la ley. Tal propensión es natural e inextirpable, aunque ha de ser posible prevalecer sobre ella, pues es compatible en el hombre con una voluntad buena en general. En la base de tal propensión hay un acto intencional, una decisión libre, aunque es imposible determinar su origen y el modo en que ha sido contraída.

Como es sabido, la propia Arendt utilizó la expresión para referirse al terror de los países totalitarios. Pero años más tarde, tras asistir en Jerusalén como corresponsal de una revista americana al juicio de Eichman, elaboró la idea de la “banalidad del mal”. Culpable de colaborar al asesinato de miles de judíos, el oscuro funcionario nazi alegó que él sólo realizaba su trabajo, que no hacía sino cumplir escrupulosamente una ley. El no había matado a nadie y ni siquiera odiaba a los judíos.

Puestos a explicar la escasa reacción de la sociedad alemana ante las leyes nazis, se puede achacar a una falta de atención, a la banalidad de seguir la corriente de lo que se hace. Antes no se mataba judíos y a nadie se le ocurriría hacerlo pero llegó un momento en que eso pudo verse como normal. Además, se explicaba claramente que la existencia de esa raza era dañina para el pueblo alemán. Así pues, la población se adhirió a esa corriente, sin que ello convirtiera a las personas en perversas o enajenadas. En otros aspectos de la vida seguían teniendo los mismos sentimientos morales de siempre.

¿Cómo nos explicamos que un adolescente británico u holandés, seguramente un buen ciudadano, pueda en un momento determinado tomar un machete y degollar a un semejante? Es que se ha metido irreflexivamente en un clima en el que eso se hace, incluso es una obligación hacerlo, sin que ello produzca el menor problema de conciencia.

Muchos ciudadanos en nuestro país se han sorprendido y escandalizado al ver en las listas de los beneficiarios de las tarjetas black a amigos, a conocidos o a figuras hasta entonces respetables, que sin duda nunca fueron ladrones ni tuvieron intención de dañar a otros. Simplemente entraron en un clima en el que ese uso de dinero ajeno era normal. Ni siquiera se les ocurrió tomar algunas cautelas para que no se conociera en qué habían empleado lo obtenido con las tarjetas. Seguramente fueron los primeros sorprendidos de que se les hiciesen reproches.

Lo mismo se podría decir de antiguos etarras. Los hay que, vueltos a la razón, reconocen el mal y el dolor causados. Pero otros siguen en la misma argumentación de Eichmann: era lo que les tocaba hacer y se hizo

Siempre se ha dicho que en el mundo anglosajón la mentira está muy mal vista y acarrea consecuencias. No es tan lejano el caso de un ministro inglés que tuvo que dimitir por haber dado el nombre de su mujer en una multa de tráfico siendo él quien conducía. En el mundo latino, sin embargo, mentir es lo que se hace si llega el caso. Engañar a Hacienda está incluso bien visto. Los ejemplos podrían multiplicarse.

El mal existe y sus raíces son sin duda muy diversas. Pero hay una que consiste en la dejación culpable de la capacidad de juzgar. Existe quien conoce el daño que inflinge a otros y, por razones que tienen que ver con el propio beneficio, decide ponerlo en práctica. Pero hay también un mal que se activa solamente porque otros lo hacen, porque es lo que se lleva en el propio grupo, porque siempre se ha hecho así. Un mal puesto en acto por personas honradas, decentes, incluso progresistas. Es la banalidad del mal.

Fuente: Atrio

sábado, 27 de junio de 2015

Mapa global señala a los peores países para los trabajadores.



La Confederación Sindical Internacional (CSI) acaba de publicar un estudio que clasifica a 141 países en función de 97 indicadores reconocidos internacionalmente para evaluar la protección de los derechos de los trabajadores y trabajadoras, tanto en la legislación como en la práctica.

Según el Índice Global de los Derechos elaborado por CSI, los diez peores países para los trabajadores y trabajadoras son Belarús, China, Colombia, Egipto, Guatemala, Pakistán, Qatar, Arabia Saudita, Suazilandia y Emiratos Árabes Unidos.

“En 73 de los 141 países analizados, los trabajadores son víctimas de despidos, suspensiones, recortes salariales y reducción de categoría por intentar negociar mejores condiciones de trabajo, mientras que en 84 países los empleadores adoptan estrategias ilegales para denegar o demorar la negociación con los sindicatos representativos”, sostiene el informe.

El Índice Global de los Derechos de la CSI asigna a cada país una serie de puntos en función de 97 indicadores. De acuerdo con la puntuación total obtenida, los países se clasifican de acuerdo a los siguientes grupos:

1. Violaciones irregulares de los derechos: 16 países incluyendo Finlandia y Uruguay

2. Violaciones repetidas de los derechos: 26 países incluyendo Japón e Irlanda

3. Violaciones regulares de los derechos: 36 países incluyendo Israel y Australia

4. Violaciones sistemáticas de los derechos: 27 países incluyendo Polonia y Estados Unidos

5. Derechos no garantizados: 27 países incluyendo Belarús, China y Nigeria

5+ Derechos no garantizados debido a la desintegración del Estado de derecho: nueve países incluyendo Siria, República Centroafricana y Palestina.

Los derechos laborales en el Perú

El Índice Global de los Derechos de la CSI ubica al Perú en la clasificación 4: “Violaciones sistemáticas de los derechos laborales”.

El informe menciona también varios casos de abusos a los derechos humanos y sindicales en el país:

En septiembre de 2014, Luis Cárdenas, un dirigente sindical en Prosegur, fue víctima de un brutal y violento ataque cerca de su domicilio.

El 21 de junio de 2014, Juan Carlos Talavera Flores, secretario de prensa del Sindicato Único de Técnicos Aeronáuticos de LAN Perú (SITALANPE), denunció haber sido detenido irregularmente.

En abril de 2014, el Sindicato de Trabajadores de la Empresa Risk Control, contratista del sector petrolero, denunció agresiones físicas y atentados contra la vida y la salud de los trabajadores. Estos hechos sucedieron mientras brindaban servicios de vigilancia a las operaciones de la empresa Savia Perú.
Datos

En prácticamente el 60 por ciento de los países, ciertas categorías de trabajadores están privadas de sus derechos laborales fundamentales.

En 11 países, uno más que el año pasado, se han registrado asesinatos de sindicalistas. Tan solo en Colombia se cometieron 22 de estos crímenes.

En el 60 por ciento de los países hay trabajadores que no tienen derecho a hacer huelga.

En dos terceras partes de los países se deniega a los trabajadores el derecho a la negociación colectiva.

La Confederación Sindical Internacional (CSI) es una confederación de centrales sindicales nacionales, cada una de las cuales agrupa a los sindicatos de ese país en particular.

Cuenta con 328 organizaciones afiliadas en 162 países en los cinco continentes, con una membresía total que ronda los 176 millones de trabajadores y trabajadoras, de los que el 40 por ciento son mujeres.

El informe “Índice Global de los Derechos de la CSI: Los peores lugares del mundo para los trabajadores” puede descargarse con un clic en el siguiente enlace [PDF, 102 páginas, 3,6 MB]:http://www.ituc-csi.org/IMG/pdf/survey_global_rights_index_2015_es.pdf

Fuente: Servindi

jueves, 25 de junio de 2015

Evangelios y Hechos: una reescritura creativa.




La Biblia misma nos orienta 
a la lectura de Dios en los sucesos del mundo 
y nos enseña justamente a reconocerlo 
como se manifiesta ahora 
y no como repetición del pasado.
(Severino Croatto).

Los escritores de los evangelios, antes que historiadores, fueron unos escritores creativos que tenían por interés orientar las a comunidades de su época, combinando las memorias del Movimiento histórico de Jesús con las experiencias del Resucitado en la vida diaria de los creyentes.

Gran parte de los textos del Nuevo Testamento constituyen relecturas del Primer Testamento a la luz de nuevas situaciones espirituales, sociales y políticas de los judíos que afirmaron que Jesús era su mesías.

Esta forma de interpretar el Primer Testamento o Biblia Hebrea es conocida como exégesis derásica, practicada por los rabinos.

Según Agustín del Agua Pérez, el Midrash es la exégesis o hermenéutica que practicaba el judaísmo antiguo y en el naciente cristianismo: “Es una exégesis de investigación y exposición del sentido de la Biblia, de ahí su nombre de Midrash o Derash (investigación)”.

Esta forma de leer los textos sagrados y de reescribirlos tiene las siguientes características:

-Es una historiografía creadora: su finalidad es clarificar el texto bíblico y hacerlo relevante para la vida de oyentes y lectores en nuevas épocas. De este modo re-cuenta las historias bíblicas, dándoles diversos matices y contextos (como el nacimiento de Abraham que aparece en el Talmud). A medida que se va contando la historia antigua, se re-crea en nuevos contextos.

-Filología creadora: las técnicas rabínicas obtienen nuevas deducciones de la Escritura y, en este sentido, una nueva escritura que descubre sentidos diversos en lo que no pareciera tan evidente. Así, se interpretan todos los pequeños detalles de la Escritura. Todas las partes de la Biblia, las consonantes, las palabras, las frases, los capítulos y las secciones como unidades autónomas que pueden ser intercambiadas entre sí originando nuevos sentidos.

-Actualización: se leen los textos antiguos con la intención de aplicarlos para el presente. Para esto se emplean dos tipos de actualización: La Halakah, que es la exégesis de textos legales, tratando de aplicar un mandamiento a la vida actual. La Haggadá, que es una exégesis más libre que juega con el texto y abarca todos los temas de la literatura judía antigua que no son legislativos: especialmente las narraciones y los poemas.

-La Escritura es explicada por la Escritura: está permitido utilizar un texto, sacado de su contexto histórico original, para anticipar la historia posterior y crear lazos entre episodios que no tendrían una conexión histórica real. Por esto no es extraño que se sigan escribiendo nuevas historias sobre Moisés o, incluso, sobre Adán y Eva.

-La Biblia tiene pluralidad de sentidos: ya que la Biblia es inagotable, esto permite encontrar pluralidad de sentidos a la hora de leerla. Un texto no se limita a los que originalmente quiso decir el autor, sino que se enriquece con la creación de nuevos contextos de lectura. Por esto no es problemático para los rabinos presentar en la Misná o el Talmud nuevas interpretaciones, como también posiciones contrarias entre rabinos y escuelas (como Hillel y Shamay) basadas en un mismo texto bíblico.

En los evangelios encontramos diversas maneras de interpretar el Primer Testamento. Mientras que, para los judíos, la centralidad yace en la vuelta a la Torah, para los cristianos, en el acontecimiento de Cristo. Los cristianos tratan de encontrar señales de ese acontecimiento en la Biblia Hebrea y por esto usan las Escrituras como un texto con el que se puede dialogar creativamente.

Aunque ya Pablo había escrito la mayoría de sus cartas, el primer evangelio escrito es el de Marcos, entre los años 60 y 70 EC. Este es un relato de la Pasión con una introducción larga. Define el significado de la palabra “evangelio” (Mc 1,1), como la Buena Noticia de que viene un salvador y liberador, y no es precisamente el emperador romano, sino un aldeano de Galilea. Marcos construye su historia alrededor de asuntos cotidianos: la casa, el lago, el camino, la familia, la sinagoga, y la gente sencilla. Uniendo lo cotidiano con lo celeste, Marcos centraliza el seguimiento en el tema de la cruz (8,27s), y anima a los creyentes a vivir en este mundo contradiciendo a los valores de la época y del imperio romano (Mc 10,42).

Marcos hace una lectura del acontecimiento de Jesús a través de la figura del Siervo Sufriente de Isaías (Is 42,1-4; 49,1-6, 50,4-11a; 52,13-53,12). En esa época, pocas personas pensaban que los textos se trataran de una profecía, y más bien los aplicaban al propio sufrimiento de Israel o del profeta. Pero Marcos logra hacer encajar los textos con todos los acontecimientos referidos al mesías. Esta es su relectura creativa. Inspiración. Así, Jesús aparece en su evangelio como un mesías sufriente, y en él “se cumple” (en el sentido derásico) la escritura.

El evangelio de Mateo fue escrito aproximadamente en el año 80 a.C, en una comunidad compuesta por judíos y no judíos (llamados paganos o gentiles). El evangelio de Mateo está escrito según el modelo de relatos biográficos de la antigüedad, como en las obras de Plutarco (50-120 d.C.) y Suetonio (70-140 d.C.). Mateo presenta a Jesús como el héroe de la comunidad, nacido por orden divino (Mat 1-2), gran maestro (Mat 5-7; 22-25), muerto por ser mesías e hijo de Dios (Mat 26-27) y resucitado (28). Como se trata de una comunidad de gente marginal, el autor se esfuerza por presentar a la iglesia como la gran asamblea divina, dignificando a personas sencillas y de razas despreciadas, de manera que Dios se hace presente en medio de los pequeñitos del reino.

Un ejemplo de la manera en que Mateo cuenta la historia de Jesús, combinando el acontecimiento de Cristo, las escrituras hebreas y la teología de su comunidad, está en el relato del nacimiento de Jesús (Mateo 1-2). En estos dos capítulos se repite con frecuencia: “Todo esto aconteció para que se cumpliera lo que dijo el Señor por medio del profeta” (1,22-23). Así, reutiliza textos que originalmente tenían otro significado, como el de una muchacha joven (en hebreo, Almah) que dará a luz un hijo (Isaías 7,14) (no se sabe quién era originalmente –probablemente la esposa del profeta), para referirse al nacimiento de Cristo a través de la virgen (Parthenos) María. De este modo el acontecimiento original del nacimiento de un niño que será señal divina es reinterpretado como el nacimiento de otro niño, el hijo de Dios.

También la identificación del nacimiento de Jesús con la aparición de una estrella y unos magos (2,1-12) corresponde a una tradición judía que identifica a la estrella de Jacob como una estrella mesiánica de Números 24,17, tal como lo anota el Targum palestinense:

Yo le veo, pero no (está aquí) ahora;

Yo le contemplo, pero no está cercano.

Un rey surgirá de los de la casa de Jacob

Y un Redentor y un jefe

De los de la casa de Israel

Y matará a los poderosos de los moabitas,

Y exterminará a todos los hijos de Set

Y vaciará a los detentores de las riquezas.

Además de esto, se enfatiza a Belén como lugar de nacimiento. Para dar relevancia a Belén como patria mesiánica, el evangelista introduce el texto de Malaquías 5,1, cambiando el significado de la pequeñez de la ciudad por el de un futuro grandioso. También el relato de la huida a Egipto puede comprenderse como historiografía creadora, una nueva manera de contar el Éxodo, para presentar a Jesús como el nuevo Moisés, perseguido por Herodes (un Faraón), y por lo que se promete un retorno liberador para Israel. A la vez, se conecta el tema del éxodo y el destierro mediante el recurso de analogía entre palabras y hechos que se narran, cuando afirma que “Raquel que llora a sus hijos y no quiso ser consolada, porque perecieron” (2,18) como un eco de Jeremías 31,11 anunciando el exilio. De esta manera, se re-crean los motivos el éxodo y el destierro a la luz del retorno mesiánico.

Los escritos de Lucas comprenden dos tomos: el evangelio y el libro de los Hechos. Los dos escritos están dirigidos a la misma persona, un hombre llamado Teófilo, a quien el autor llama excelentísimo, lo que podría indicar que era una persona gentil, pagana, en un puesto de autoridad, alrededor del año 85 EC. Como Mateo, Lucas se preocupa por los relatos de la infancia, la preparación para el ministerio incluyendo el bautismo, su ministerio en Galilea, el viaje a Jerusalén, el ministerio en Jerusalén y la última cena, la pasión su muerte, sepultura y resurrección. Tanto en el evangelio como en los Hechos, se resalta la presencia de los pobres, los marginados y las mujeres. Hay un fuerte sentido de continuidad en el que la iglesia, en el Espíritu, está relacionada con Jesús. Pablo y Pedro son continuadores de la proclamación de Jesús. A su vez, Jesús es continuador de la tradición profética del Primer Testamento (Lc. 4:16-30). Es el Espíritu el que da continuidad, es el verdadero protagonista, el que está presente en toda la obra (Lc. 4; Hch. 2; Hch. 11).

Un ejemplo de relectura es Lucas 4,14-44. Aquí hay un Derash de Isaías 61,1-2, en el que el autor ve en Jesús una actualización del llamado al profeta en una nueva época. La frase “Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros” (4,21) es una expresión típica de la exégesis derásica, que propone actualización del mensaje: Jesús encarna el mensaje porque él quiere poner en práctica el mensaje que iba dirigido a otra persona, al profeta Isaías y sus discípulos.

El evangelio de Juan, escrito cerca del año 90 EC, es un caso particular entre los evangelios. Su lenguaje es diferente. Su estructura no sigue el patrón de los otros tres evangelios -conocidos como los sinópticos-. Y su teología pretende revelar nuevos aspectos de la vida de Jesús. Enfatiza la relación del cristiano individual con Jesucristo (Jn 21). Se enfoca en presentar a Jesús como el Hijo de Dios, existente antes de la creación (Jn 1; 17,1-3). Usa los símbolos de la vid (Jn 15) y del pastor (Jn 10) para mostrar que para la comunidad es vital creer a la vez que permanecer en Jesús. El discipulado es más importante que el apostolado. Resalta el ministerio de la mujer y su participación activa en la iglesia. El Discípulo Amado es una persona real, pero más que eso es la encarnación de los ideales del evangelista: es el modelo para los cristianos.

Algunos han dicho que Juan es un libro antijudío. Es cierto que refleja el conflicto entre los cristianos y los judíos hacia el final del siglo I. Sin embargo, se vale de las categorías hebreas de interpretación para aplicar al acontecimiento de Jesús lo que está en las escrituras hebreas. La presencia de las fiestas hebreas en el evangelio de Juan es muy interesante. En cada una de ellas, Jesús aparece como el sentido de la fiesta. Por ejemplo, la expresión: “yo soy la luz del mundo” (Juan 8,12-20) se encuentra dentro del contexto de la Fiesta de los tabernáculos, celebración para recordar y representar de manera teatral la peregrinación de Israel por el desierto en su marcha hacia la tierra prometida.

Durante los cuarenta años de peregrinación, el pueblo de Israel fue guiado por una columna de fuego. Para recordar esta luz divina que los guiaba por el desierto, había una ceremonia de luces como parte de la celebración anual de la fiesta de los tabernáculos. Durante cada noche de la fiesta la congregación de Israel se reunía en el patio de las mujeres. Toda la plaza estaba iluminada por lámparas y antorchas. Durante toda la noche el pueblo celebraba con canciones alabanzas y danzas. Los levitas tocaban trompetas y arpas y los hombres danzaban con antorchas en sus manos. Era uno de los eventos más alegres de todo el año para los judíos. La luz de la ceremonia representaba la presencia de Dios entre su pueblo. Y, en medio de esta ceremonia de luces, el Jesús de Juan declara “Yo soy la luz del mundo” (8,12).

Así, el escritor del evangelio ve en Cristo a la misma presencia de Dios entre el pueblo, la manifestación de la Shekinah. Él es la Torá encarnada. A él aplica Juan lo que dijo Isaías acerca de Israel “Poco es para mí que tú seas mi siervo para levantar las tribus de Jacob, y para que restaures el remanente de Israel; también te di por luz de las naciones, para que seas mi salvación hasta lo postrero de la tierra” (Is 49,6; cf. verso 3)

Los evangelios son muestra de que la fe cristiana consiste en una relectura creativa de los acontecimientos presentes a la luz de las Escrituras. Esta es la lógica del círculo hermenéutico: del mundo a la Biblia, y de la Biblia al mundo.

La lectura de las escrituras no debe limitarse solamente a esclarecer la situación histórica en que se produjo el texto. Este es trabajo de los exégetas, muy valioso para comprender el el contexto vital de las primeras comunidades que produjeron los textos.

Pero es, ante todo, un acto creador y creativo, que se vale del potencial simbólico de los textos para hacer de ellos un nuevo mensaje para nuevas realidades.

Las nuevas experiencias espirituales, culturales y sociales permiten a las personas ver otras dimensiones de estos textos, de modo que la lectura no se agota en la primera intención, sino que se renueva según los signos de los tiempos.



Juan Esteban Londoño

Juan Esteban Londoño (1982), filósofo y teólogo colombiano. Magister en ciencias bíblicas. Ha realizado estudios de Filosofía y Literatura en la Universidad de Antioquia; de Teología en el Seminario Bíblico de Colombia; y de Ciencias Bíblicas en la Universidad Bíblica Latinoamericana, de Costa Rica. Actualmente es candidato a Magister en Filosofía en la Universidad de Antioquia. Ha publicado los libros El nacimiento del liberador, un sueño mesiánico (2012), Para comprender el Nuevo Testamento (2013), diversos artículos en revistas, como también obras musicales y literarias.

miércoles, 24 de junio de 2015

Del dolor a la esperanza: un jaque a la indiferencia.

Ni una Menos, Córdoba, capital, 3 de junio
Carolina Abarca
Sophia

De no ser cierto, resultaría extravagante pensar que un tuit es capaz –en potencia– de movilizar y poner de pie a un país entero; a no ser que ese tuit albergue, no el reclamo de una mujer anónima, sino el clamor de una sociedad presa de un silencioso dolor.

El pasado 3 de junio cientos de miles de varones y mujeres de mi país marchamos en contra de la violencia de género bajo la consigna #NiUnaMenos. Podría haber sido un femicidio más, otra muerte como las que en Argentina ocurren cada 31 horas y que son noticia por un rato para luego diluirse y dar lugar a la próxima. Pero esta vez hubo algo diferente que, sin duda, nos conmovió a muchos. Hey! “Nos están matando” gimió una mujer en las redes. Era una clara invitación a despertar del sueño y salir de la anestesia frente a una realidad que nos está ocurriendo a todos, a pesar de nuestra insolente indiferencia. La movilización no tardó en levantar vuelo y encontrar eco en países vecinos convirtiéndose en noticia de los principales medios del mundo.

Quizás en un acto de rebeldía ante una sociedad sensacionalista, espasmódica y cortoplacista me propuse dejar pasar unas semanas antes de sentarme a escribir, invitándome a sostener la vigencia de la reflexión a través del tiempo. Posiblemente también lo necesité para procesar y entender lo que por algunos días estuvo entreverado adentro. Esta marcha me había interpelado en demasiados niveles, me cuestionaba como mujer, como ciudadana, como persona y como cristiana.

“Nos están matando” fue sin duda, en un comienzo al menos, un mensaje que reclamaba complicidad femenina. ¿Realmente a las mujeres nos es indiferente que estén prendiéndonos fuego y metiendo nuestros cuerpos sin vida en bolsas de basura? ¿Hasta cuándo vamos a continuar minimizando el hecho de que, a la vuelta de la esquina, hay mujeres a las que se las mata no para robarles, no por estar implicadas en asuntos clandestinos sino por el simple hecho de ser mujeres? Sin duda es una realidad dolorosa que resulta difícil de asumir y mirar de frente. Pero ante la cruel evidencia de que, a pesar de vivir en un país democrático donde supuestamente rige el estado de derecho, los femicidios continúan ocurriendo con total impunidad ¿no será tiempo de preguntarnos si hay algo más profundo, enraizado en nuestra manera de relacionarnos, de educar, de pensar y de actuar que fomenta -o en el “mejor” de los casos tolera y consiente- esta clase de actos y comportamientos?

A primera vista, alguno podría pensar que se trata de una cuestión de mujeres, pero habría que ser muy necio para, después de reflexionar apenas unos minutos, no advertir que se trata de una problemática social y cultural de la que todos somos víctimas y parte. Si no pensemos en los 2200 niños que se quedaron sin mamá entre 2008 y 2014 en Argentina, o en todos aquellos padres, madres, hermanos y amigos que perdieron a sus mujeres queridas. Cuanto más se potencia el dolor de la perdida cuando se combina con la impotencia de ver que la justicia no es capaz de pronunciarse y permite que los asesinos continúen sueltos –y reincidiendo en muchos casos-.

Ocurre que, como país y como sociedad, no hemos asumido aún esta realidad. La ausencia de estadísticas oficiales sobre femicidios en la Argentina es la mayor prueba de esto. ¿Cómo vamos a trabajar en la solución de un problema que no hemos asumido todavía como propio? ¿De qué manera vamos a exigir a nuestros representantes que pongan empeño y recursos en medir y accionar frente a una realidad que todavía sentimos ajena? Quizás la fuerza de esta marcha nos indica que ya es tiempo de tomar posición y generar opinión propia sobre el tema. Porque de seguro no seremos capaces de engendrar nuevas y superadoras maneras de concebir la vida hasta tanto no sintamos que esta realidad nos interpela a cada uno, con nombre y apellido.

Pero hay algo más profundo aún que me resuena adentro hace días. No puedo dejar de pensar en cómo la manera en que hemos naturalizado las pequeñas violencias cotidianas resulta, a fin de cuentas, un escandaloso atropello a la vida. Es que me parece una locura pensar que en pleno siglo XXI tengamos que hacer una marcha para pedir que no nos maten. ¿Qué nos pasa!? Los seres humanos nos jactamos de haber evolucionado en tantos aspectos cuando, en verdad, tan poco lo hemos hecho en los más importantes como lo es el respeto a la vida y a nuestra propia humanidad.

Posiblemente valga la pena preguntarnos qué es lo que tanto nos duele adentro que buscamos callar a golpes fuera. ¿Qué es esa manera de vivir que estamos eligiendo y replicando a pesar de que hace que engendremos tanta violencia? Porque es claro que la violencia exterior es solo la manifestación de algo que empieza mucho antes dentro. ¿Qué es lo que nos está pasando en el corazón, en el alma, que lleva a algunos a matar y a otros a mirar esas muertes con indiferencia? Lo peor es que la mayoría no tenemos ni idea… Porque hemos naturalizado la violencia como manera de relacionarnos y la indiferencia como forma de sobrevivir ante tanto dolor que nos infringimos a diario.

Quizás peco de simplificar demasiado, pero no puedo dejar de ver detrás de todo esto a hombres y mujeres asustados y dolidos, queriendo comprar con poder, dinero y a los golpes un poco de amor y reconocimiento. Y si así fuera, si lo que hay detrás de la violencia es miedo y dolor – o miedo al dolor– me pregunto si estas dos experiencias no podrán convertirse en algo distinto… ¿No es acaso el dolor tan capaz de destruir nuestra vida como de transformarla y hacerla más plena? Esta marcha fue un acto de coraje en el que, de la mano de valientes mujeres, la sociedad misma se animó a reconocer una herida por la que silenciosamente se está desangrando. Es esto lo que la hace histórica, ya que solo el encuentro con esta realidad doliente tiene en potencia la conversión y evolución hacia una mejor.

Para hablar de conversión el Nuevo Testamento utiliza la palabra metanoia, que quiere decir cambio de mentalidad. Solo a partir del encuentro verdadero con una realidad viva produce el cambio de conciencia necesario para dar una respuesta superadora de dicha realidad. Dicho así, parecen sonsos los enormes esfuerzos que hacemos para esconder bajo la alfombra las realidades que nos duelen como esperando que, negándolas, desaparezcan. Ya lo dijo Einstein, “Ningún problema puede ser resuelto en el mismo nivel de conciencia en el que se creó”. ´Pero mucho antes lo dijo Cristo con su vida, ¿no se resume acaso Su mensaje a la promesa de que vivir encontrados en el amor, a pesar del dolor, nos conduce a la plenitud de la Vida?

Es mi deseo que el reclamo de #NiUnaMenos se convierta finalmente en los cambios concretos que necesitamos en nuestras instituciones y en nuestra cultura para lograr que los femicidios dejen de ser una realidad cotidiana. Pero ojalá también este basta nos haya llegado al alma y ponga en jaque nuestra indiferencia ante la realidad del otro, que no es más que la nuestra. Todavía hay esperanza mientras seamos capaces de generar –en las redes, en la plaza, el laburo o nuestras casas– encuentros que nos muevan a la conversión. No estamos solos, la marcha no ha sido en vano. Una nueva consciencia ha llegado para recordarnos que la violencia no es el único camino y que, juntos y encontrados, es posible transformar el dolor en un motor capaz de construir una realidad mejor.

Fuente: Atrio

martes, 23 de junio de 2015

Hambre, pobreza, seguridad o soberanía alimentaria.


"La seguridad alimentaria no cuestiona el modelo productivo, ni su impacto social, aun cuando la FAO pone el acento en su cónclave en la alimentación y el cambio climático. El supuesto de la seguridad alimentaria parte de la utilización de la producción agraria en las condiciones tecnológicas y formas productivas que generalizan y dominan las transnacionales de la alimentación y la biotecnología, principales beneficiarias del orden productivo del capitalismo contemporáneo."


La pobreza y el hambre reaparecieron en el debate, a propósito de la premiación en la FAO sobre la situación nutricional en la Argentina.

El tema adquirió relevancia con la difusión de datos de la pobreza y la indigencia realizados por la Presidente, afirmando que la pobreza es menor al 5% y apenas superior al 1% la indigencia.

El Ministro de Economía aclaró rápidamente que el premio para la Argentina era por estar el país "por debajo del 5% del índice de hambre"[1]y no de la pobreza. Es una situación que el país mantiene junto a Chile, Brasil y Uruguay, mientras que Bolivia y Paraguay, entre los vecinos, están aún por encima de ese guarismo.

La pobreza y el hambre son cuestiones muy distintas, aunque asociadas, en un país que existe población subalimentada, pero también con gran capacidad para atender las necesidades alimentarias, siendo la disposición de recursos suficientes el límite para la población menos favorecida.

Pretendemos llamar la atención sobre el hecho que la pobreza está más allá del hambre y se manifiesta en la imposibilidad de resolver necesidades sociales más amplias, como la salud, la educación, la vivienda o la recreación.

Esto dicho en un país con alta densidad de población mayor con ingresos jubilatorios relativamente escasos con relación a los necesarios. La estadística del ANSES asegura que más de la mitad de los jubilados nacionales percibe la mínima, en una pirámide de ingresos cada vez más achatada. Pero también son millones los que reciben ingresos escasos derivados de una política social masiva, no universal, que puede y hasta cierto límite, paliar las necesidades básicas, pero no las extendidas, y explican la pobreza más allá de los indicadores que se esgriman.

Agreguemos que la pobreza se mide de distintas formas y que en Argentina se tiene en cuenta la pobreza estructural y la pobreza por ingresos. La primera remite a las necesidades básicas insatisfechas y que se miden con cada censo de población. La segunda está asociada a la capacidad de resolver una canasta mínima. Por eso, puede haber pobres estructurales con ingresos superiores a los mínimos, y al revés, población sin, o con bajos ingresos y con patrimonio, por lo que la estadística no los incluye como pobres estructurales. Se puede vivir en barrios de emergencia con grandes ingresos, o en viviendas heredadas en zonas más ricas y con ingresos escasos o nulos. En otros países, los indicadores son diversos y no siempre fáciles de utilizar para comparaciones no felices.

Los datos de la pobreza están discontinuados por el INDEC desde el 2013 y la referencia ofrecida por la Presidenta remite a esa remota evaluación, muy criticada desde distintos ángulos profesionales, más allá de la cercanía o lejanía con los objetivos y propósitos del gobierno. La difusión de datos actualizados sigue siendo una asignatura pendiente por parte del INDEC.

Distintos estudios remiten a porcentajes estimados del 16 al 25% de pobreza, una cifra menor al pico del 2002, pero muy superior a la media histórica de la Argentina. Ello pone de manifiesto problemas estructurales del orden económico social en la Argentina y que se derivan de los cambios profundos generados en los últimos 40 años, desde el rodrigazo, la dictadura y la década del 90. Son procesos que contaminan el presente y se mantienen como problemas y desafíos a resolver por la sociedad, y claro, en el ámbito de la política, que parece lejana si aludimos a los principales discursos y proyectos que disputan el gobierno local.

Seguridad versus soberanía alimentaria

En la reciente reunión de la FAO[2] se pasó revista a la situación de la alimentación de la población mundial y en ese marco el estado de la seguridad alimentaria, enfatizando los avances en ese sentido, vinculados a las metas del milenio que se analizan en este 2015. Sin embargo, es importante mencionar que desde el movimiento campesino mundial se ha generalizado la concepción de la soberanía alimentaria, crítica, contradictoria y diferente al concepto de seguridad alimentaria sustentado por el organismo internacional y el discurso hegemónico en materia de producción agraria y alimentaria.

La seguridad alimentaria no cuestiona el modelo productivo, ni su impacto social, aun cuando la FAO pone el acento en su cónclave en la alimentación y el cambio climático. El supuesto de la seguridad alimentaria parte de la utilización de la producción agraria en las condiciones tecnológicas y formas productivas que generalizan y dominan las transnacionales de la alimentación y la biotecnología, principales beneficiarias del orden productivo del capitalismo contemporáneo.

Por su parte, la soberanía alimentaria recupera para los pueblos, las comunidades, la agricultura familiar y la pequeña producción agraria la capacidad de decidir qué producir, para quién, cómo, y con quién llevar adelante el proceso productivo. No se trata de alimentar de cualquier modo, sino respetando el metabolismo de la naturaleza, del que el ser humano es parte. Esta concepción parte de criticar el modelo productivo hegemónico, y la concepción que conlleva la categoría de la seguridad alimentaria.

Entre ambas posiciones puede pensarse la transición para la resolución del hambre, utilizando la articulación de la seguridad alimentaria con soberanía, como se sugiere en los objetivos de política pública en el Estado plurinacional de Bolivia. Ello supone alimentar a la población que tiene límites de ingresos para el acceso de alimentos, mientras se modifica el modelo de producción para generalizar una política sustentada en la soberanía alimentaria.

Convengamos que en la Argentina, la discusión entre seguridad y soberanía alimentaria es un debate pendiente, asumido como discurso de un activo militante por otro modelo productivo y escamoteado por las clases dominantes y sus representaciones políticas e ideológicas. Estas adornan sus mensajes con el ropaje de la asistencia alimentaria (asistencialismo) para sustentar el mecanismo de la obtención de ganancias y de la acumulación para la dominación capitalista.

Buenos Aires, 13 de junio de 2015

Notas

1- Ver aquí (consultado el 12/06/2015)

2- El Estado de la Inseguridad Alimentaria en el Mundo 2015. En: ver aquí(consultado el 12/06/2015)

El sueño imposible de Martin Luther King.


Germán Gorráiz López, analista

El 3 de abril de 1.968, víspera de su asesinato, el Premio Noble de la Paz y activista de los derechos civiles, reverendo Martin Luther King ,declaró a su seguidores “ …He visto la tierra prometida. Quizá no pueda llegar con vosotros pero deseo que sepáis que nosotros, como pueblo, conseguiremos la tierra prometida”, con lo que se adelantaría casi medio siglo a la elección de un Presidente afroamericano. Así, por primera vez en la Historia de EEUU, en 2008 es elegido como Presidente de la Nación un negro debido al voto de las minorías latina y afroamericana, con lo que los partidos tradicionales del establishment habrían cambiado su estrategia electoral para captar un voto que en el horizonte del 2050 será mayoritario.

Así, según la Oficina del Censo de EEUU, hacia el 2043 los blancos dejarán de ser la mayoría de la población estadounidense y serán desplazados por la suma de la población hispana que aumentaría de 53,3 millones en la actualidad a 128,8 millones en 2060 y la afroamericana, que pasaría los 41,2 millones actuales a los 61,8 millones previstos por las proyecciones.

Sin embargo, según un artículo de la publicación canadiense Global Research, 47,8 millones de estadounidenses vivirían bajo el umbral de la pobreza y deberían utilizar los cupones de alimentación (SNAP por sus siglas en inglés), para satisfacer sus necesidades alimenticias, lo que se traduce en un aumento del 70 por ciento desde 2008 debido a la elevada tasa de desempleo y pobreza que se habría ensañado con las minorías latina y afroamericana. Así, desde el inicio de la recesión en 2008, 28,2 millones de personas se inscribieron en el SNAP y unos 10 millones de niños vivirían en la pobreza extrema, según dicha publicación. Por otra parte, la reducción en el Presupuesto del 2015 de cerca de 85.000 millones de dólares, ha obligado al Programa Especial de Nutrición Suplementaria para Mujeres, Infantes y Niños (WIC) a eliminar beneficios a casi 600.000 madres, lactantes y niños, según la publicación canadiense.

Además, la tasa de paro de EEUU en el mes de Mayo subió hasta el 5,5 % y continúa el endemismo crónico de altas tasas de desempleo en la población afroamericana (17%), cifra que se triplicaría en cuanto atañe a la población joven negra (51%), con los consiguientes efectos colaterales de marginalidad, economía sumergida e incremento de los índices de delincuencia. que se elevaría hasta cifras ionosféricas en lo que respecta a la población joven pues seguiríamos hablando de 8,7 millones de desempleados (superior a la población de Chicago), a lo que habría que sumar los 6,7 millones que trabajan a tiempo parcial por las condiciones de sus empresas o por motivos económicos (comparable al total de vecinos de Detroit y Baltimore) y los 2,2 millones que no buscan empleo (equivalente a Baltimore), con lo que la frase icónica de Luther King “I have a dream” (Tengo un sueño) continúa como una utopía inalcanzable en la distópica sociedad estadounidense del siglo XXI.

La distopía afroamericana y la vigencia de las ideas de Jeremiah Wright

Una distopía sería “ una utopía negativa donde la realidad transcurre en términos antagónicos a los de una sociedad ideal” y se ubican en ambientes cerrados o claustrofóbicos. Así, Detroit sería un escenario distópico de naturaleza real (no ficitica) y el paradigma del mayor éxodo masivo de población sufrido por una ciudad moderna durante los los últimos 70 años , éxodo motivado por la conjunción de razones económicas (la corrupción generalizada de las autoridades municipales y el hecho de que los altos impuestos por vivir dentro del área metropolitana se reducían drásticamente en el extrarradio) y raciales. Así, Detroit habría pasado de tener en el área metropolitana 1, 8 millones de habitantes en 1960 ( 90 % de raza blanca) a 700.000 en el 2012 (84% de raza afroamericana), movimiento migratorio centrífugo conocido coloquialmente como “white fligt “ (vuelo blanco) ya que la mayoría de la población que emigraba a los extrarradios era de raza blanca y de clase media y alta, quedando la población de color confinada al este de la ciudad en una zona irónicamente denominada “Paradise Valley” (Valle paraíso).

Nos encontraríamos pues ante un escenario distópico, donde el 36% de la población viviría por debajo del umbral de la pobreza y con la tasa de delincuencia más alta de todo EEUU, favorecido por la lacerante falta de inversiones en los servicios públicos y la existencia de miles de solares y viviendas abandonados vacíos que deberán ser derruidos por el Ayuntamiento. Además, la drástica recaudación de impuestos obligará a recortar todavía más los programas de asistencia social, subir los impuestos y privatizar la mayoría de servicios públicos debido al déficit acumulado y al nivel de los bonos emitidos ya que no pueden imprimir dinero para financiar sus déficits como lo hace la nación, situación extrapolable a otras muchas ciudades de mayoría afroamericana. Así, la ciudad de Camden, en Nueva Jersey, la segunda ciudad con mayor tasa de criminalidad de Estados Unidos, se vio abocada a despedir al 45% de sus fuerzas del orden, con lo que la conjunción de tasas de paro estratosféricas ( superiores al 15 %), drástica reducción de los programas de asistencia social para una población de facto subsidiada y la actuación desmesurada y con claros tintes racistas de las fuerzas de orden público,

El reverendo Wright en un sermón pronunciado en el 2001 en la parroquia de la United Church of Christ de Chicago expresó la necesidad de una metanoia colectiva de la sociedad estadounidense “que transforme las guerras militares imperiales en guerras políticas internas contra el racismo y las injusticias de clase”, para lo que propuso una redistribución fundamental de la riqueza a través de la reasignación del presupuesto público. Citando el “regalo de la Administración de George W. Bush de 1.300 billones de dólares en exenciones de impuestos para los ricos”, replicó con una propuesta de financiación pública de asistencia médica universal y de reconstrucción del sistema educativo para ponerlo al servicio de los pobres.

Asimismo, en una conferencia pronunciada en la Universidad Howard (Washington) en el 2006 afirmó: “Este país se fundó y está dirigido según un principio racista (…) Creemos en la superioridad blanca y en la inferioridad negra (…) más que en el propio Dios”, según un extracto publicado por The Wall Street Journal. Obama, hijo espiritual del Reverendo Wright y deudor del título de su libro “La Audacia de la Esperanza,”, se vio forzado a renegar de su paternidad ideológica y no dudó en desmarcarse de la influencia de su mentor religioso ante los ataques recibidos siendo todavía senador, pero en su libro “Los Sueños de mi padre” , habla sobre la actitud vital de la población afroamericana , marcada por el estigma generacional de “una segregación racial que ha caracterizado el devenir norteamericano” según sus palabras, herida sin cicatrizar que posiblemente vuelva a abrirse y estallar en el final de su segundo mandato.

El racismo policial y el papel de las Fraternidades

Tras la muerte del adolescente afroamericano Trayvon Martin por el vigilante George Zimmerman ( absuelto de los cargos de asesinato), el profesor de Estudios Culturales y Negros en la Universidad Duke, Mark Anthony Neal afirmó:”Lo primero que aprendimos es que no hemos superado el asunto de la raza. En la elección de 2008 se tenía la esperanza de que haber elegido a Obama nos permitiría trascender las cuestiones de raza”, pero la deriva totalitaria sufrida por EEUU durante el mandato de George W. Bush provocó que en nombre de la sacro-santa seguridad del Estado se llegara en la práctica a anular el principio de inviolabilidad ( habeas corpus) de las personas, instaurando de facto el principio de “presunción de culpabilidad” en lugar del primigenio de “presunción de inocencia”, lo que habría quedado como estigma imborrable en las fuerzas de seguridad de los EEUU y tendría su reflejo en la prepotencia, brutalidad y el desprecio racial que destilan las intervenciones policiales en las grandes ciudades de EEUU, elementos constituyentes de la llamada “perfección negativa”, término empleado por el novelista Martín Amis para designar “la obscena justificación del uso de la crueldad extrema, masiva y premeditada por un supuesto Estado ideal”. Así, tras la muerte todavía sin aclarar del joven afroamericano de 18 años Mike Brown por disparos de un policía blanco en Ferguson (Missouri) , la población afroamericana volvió a rememorar la década de los 60 y la lucha por las libertades civiles encabezada por el reverendo Martin Luther King, Premio Nobel de la Paz (“Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces, pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos”).

Según elinformador.com.mx, casi la totalidad de las nueve hermandades históricamente negras, (conocidas como ”Las Nueve Divinas”), nacieron del conflicto racial en el país y fueron fundadas en los campus universitarios a principios de la década de 1900 cuando los estudiantes negros se enfrentaban a prejuicios raciales y a la exclusión. Así, según Gregory Parques, profesor asistente en la Escuela de Derecho de la Universidad Wake Forest y miembro de la fraternidad Alpha Phi Alpha. “hubo un momento en que las fraternidades negras estaban en la vanguardia de la lucha por los derechos civiles, pero esos días se han perdido en la memoria” pues la mayoría de sus dirigentes estarían sedados y adormecidos debido a las cuantiosas aportaciones que reciben de los fondos federales.

Sin embargo, la persistencia de la violencia policial contra la población afroamericana y la práctica impunidad de la policía (cuyo penúltimo exponente sería el asesinato de 9 personas en la iglesia metodista afroamericana de Charleston (Carolina del Sur) entre los que se incluye el senador demócrata Pinckney), hará oscilar en sus valores la otrora monolítica actitud de las Fraternidades de permanecer al margen de las protestas violentas. Así, fraternidades negras como Omega Psi Phi, Alpha Phi Alpha y Beta Phi Sigma y las hermandades Zeta Phi Beta y Gamma Sigma Rho han hecho un llamamiento a sus miembros para que se unan a las protestas contra las actuaciones policiales, con lo que podríamos asistir al agigantamiento mediático del líder activista pro-derechos civiles Jesse Jackson y a una nueva gran marcha pacífica sobre Washington (Martin Luther King, 1.963), no siendo descartable una posterior reedición de los violentos disturbios raciales del verano de 1963 que podría hacer que las áreas metropolitanas con altas tasas de población afroamericana ( New Orleans, Washington, St-Louis, Los Ángeles, Atlanta, Cleveland y Chicago) estallen en violentos disturbios callejeros donde se entremezclarán las demandas sociales con las de segregación racial, olvidando las enseñanzas de Martin Luther King (“La violencia crea más problemas sociales que los que resuelve”) y quedando postergado “sine die” su sueño utópico de ver sentados en la misma mesa a los hijos de blancos y negros en las praderas de Georgia.


lunes, 22 de junio de 2015

Los signos de los Tocapus son la escritura de los Incas.


- La antropóloga Gail Silverman revela sus hallazgos de más de 30 años de investigación.

Por Victor Alvarado

La antropóloga estadounidense Gail Silverman presentó el jueves 18 de junio a las 7 p.m. en una audición de Radio Filarmonía los tomos 1 y 2 de su obra “Los signos del Imperio”, en el que revela sus hallazgos sobre lo que ella llama la escritura pictográfica de los Incas, resultado de más de 30 años de investigación en las comunidades quechuas del Cusco, que aún mantienen vivo el legado idiomático del Tahuantinsuyo. La obra fue comentada por los estudiosos Alberto Benavides Ganoza y Róger Ravines. A continuación la entrevista exclusiva que le hizo Víctor Alvarado a la investigadora.

- Dra. Silverman, luego de los hallazgos hechos por usted y que están expuestos en su libro “Los signos del Imperio”, considera que la escritura inca fue pictográfica?


Por los datos que tengo actualmente, parece que es una escritura pictográfica porque el signo se refiere al referente, por ejemplo el damero en negro y blanco significa la mazorca del maíz del mismo color, porque tanto el damero como la mazorca tienen la misma forma geométrica.

- ¿Si es así con que escritura antigua del mundo es comparable o subsidiaria?

Todas las escrituras del mundo han empezado desarrollando un sistema de signos basado en formas geométricas que se encuentran en la naturaleza o en formas concretas hechas por el ser humano.

- Usted, alguna vez ha dicho que muchas ideogramas incas tienen semejanzas o están emparentados con los de la antigua cultura china Explique este hallazgo.

Voy a dar dos ejemplos de signos incas y chinos. Primero, en chino el ideograma shan expresa la montaña en la forma de tres triángulos, en la que la del medio es más alta. En el caso del signo inca, se trata de una serie de triángulos para decir orqokuna o las montañas. El segundo ejemplo es más interesante, se trata del tocapu 11 de la lista de Barthel y decorado la túnica inca de Dumbarton Oaks (1). El signo inca se dice pilpintu o sea la mariposa y en china, gege, el hermano mayor.
Legados


- ¿Qué tan cerca o tan lejos estamos de conocer el cuerpo completo de la escritura de los incas? ¿Cuánto es lo que conocemos? ¿Acaso un 10, 20, o 30%?

Primero necesitamos saber la categorización de los signos incas localizados en los soportes como metal, madera, cerámica, muros exteriores de adobe, lo que nos lleva a buscar más ejemplos en los museos y colecciones privadas para empezar a saber cuántos tocapus o signos inca hay. Estamos en una tarea que recién comienza.

- ¿Qué cronistas nacionales e internacionales anteriores a su investigación han caminado por su misma ruta de investigación y respaldarían sus hallazgos?

Hay por lo menos cuatro cronistas que dibujan, nombran y describen varios signos incas. Estos son Felipe Guamán Poma de Ayala en su Nuevo Crónica, quien nos dibuja la rejilla, los triángulos en series, cuadros dentro de cuadros, etc.; Segundo Ávila, describe los tocapus 22, 23 y 24; y el Padre Martin de Murúa nos ha dejado instrucciones para tejer un motivo cuatripartito de cuatro colores para ser llevado por la coya durante la cosecha del maíz en el Cusco. Esta instrucción confirma mi decodificación del damero en el maíz. Y finalmente el cronista Santa Cruz Pachacuti que nos han dado el gancho como canal de irrigación y cuadros encima de cuadros como ancestros.

- Usted ha llegado a identificar 13 motivos de la comunidad campesina quechua hablante de Q´ero que tienen paralelo con los motivos inca ¿Cuándo usted dice “motivos” está diciendo signos escriturales? Si es así cuántos motivos faltaría conocer o de cuántos motivos estaría conformado el legado escritural inca?

No podemos contestar ahora a esta pregunta.
Algunos signos


- Según la tesis de su libro, su hallazgo de 10 sufijos, 6 afijos, 5 sustantivos de edificios y 7 geográficos, fundamentan la existencia de una escritura inca. ¿Esos hallazgos tácitamente significan que hay otro tanto más de sufijos, afijos y sustantivos que faltaría conocer?

Cuando tengamos más nuevos signos incas, podríamos establecer definitivamente la escritura y sus partes gramaticales.

- Para nuestros electores podría traducir los dos o tres signos que usted ha descubierto que confirman la existencia de una escritura inca?

Sí, por ejemplo existen tres signos tejidos en las esquinas inferiores de la túnica de Dumbarton Oaks. Un panel negro, líneas curvadas y el damero que se leen como un terreno negro sin cultivos, los surcos, a las semillas de maíz negro y blanco. Otro es el signo de las acllas (mujeres que servían al inca) con el sitio provincial de su probable residencia.

- ¿Tiene pendiente nuevas revelaciones sobre la escritura de los incas?

Estoy alistando el tomo 3 de mi serie “Los Signos del Imperio”, en donde muestro los signos ocultos en telas incas y de los Q’ero.

Nota:

(1) La túnica inca en referencia pertenece a la Colección Precolombina del Instituto Dumbarton Oaks con sede en un barrio de Georgetown, en Washington, EE.UU.

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Otras noticias:

Fuente: Servindi

domingo, 21 de junio de 2015

La Iglesia no es “romana”; es ¡católica!.



Jesús Mª Urío Ruiz de Vergara

Normalmente no me suelo exaltar cuando escribo, al contrario de los arrebatos que puedo tener cuando hablo. Aunque procuro que sean los menos. Pero al escribir vas pausando tus impulsos, y controlando y bajando la adrenalina. Pero hoy tengo ganas, si bien no las voy a dejar que salgan libremente a la palestra, de trinar y berrear contra ciertos católicos, de los que dudo, por sus comportamientos y tomas de postura ante el Papa, que sean, o siquiera quieran ser, verdaderos cristianos. No pretendo, y no hago, un juicio ético, sino una valoración teórica y general de ciertas tendencias que están demostrando, hasta la saciedad, que, o sus protagonistas no son miembros de la comunidad eclesial, o no entienden nada de qué pueda significar serlo. Y estas personas a las que me refiero están, viven, o trabajan, en Roma, y son considerados muy afines al papado, y a la curia vaticana. Pero, de vez en cuando, surgen excepciones. Y con el papa Francisco la excepción se está convirtiendo en regla.

Nos hemos enterado hoy que e un periódico italiano, “L’Espresso”, difundió ayer el borrador de la próxima encíclica papal, “Laudato si” (alabado seas, que son las palabras con las que Francisco de Asís comienza su himno de las criaturas). El adelanto de la publicación, no respetando el embargo del documento hasta su publicación oficial, ha enojado mucho a la Santa Sede, y, en `particular y en concreto, al Papa. Se trata, evidentemente, de un acto de hostilidad, según el criterio de todos los vaticanistas. Esta filtración ha sido atribuida por los vaticanistas a medios conservadores romanos, que pretenden hacer daño a la estima de los fieles hacia el papa, así como intentar rebajar los magníficos índices de aceptación de que goza el Pontífice. El reputado, y leal, vaticanista Giacomo Galeazzi, quien ya había señalado que el entorno del L’Espresso”, “había sido especialmente activo en las últimas semanas al atacar algunos artículos de La Civiltà Cattolica, la revista jesuita supervisada por la Secretaría de Estado del Vaticano”. Y opinó que se trata “de un ulterior ataque preventivo a una encíclica que tiene en su haber un primado histórico: es la primera que es atacada aún antes de su salida”. Además señala dos objetivos que persiguen con el adelanto de la publicación de la encíclica: 1º), “Debilitar el mensaje de la encíclica, ya que en algunos puntos critica con dureza las políticas medio ambientales de países económicamente poderosos, y 2º), atacar la figura del Pontífice , azuzando las resistencias a su estilo de renovación de la Iglesia, difundiendo, incluso, bulos, como el de sugerir temas que incluso no están incluidos en el documento, como ciertas propuestas sobre planificación familiar. Se ha apuntado al vaticanista Sandro Magister, que lo es, en verdad, en el arte de criticar y obstaculizar la obra de Francisco.

Y todo esto, ¿por qué? Esa actitud de crítica y enfrentamiento feroz, ¿es solo por antipatía personal al Papa, porque no consiguen crear empatía con su estilo, porque piensan que es un peligro para la Iglesia? Nada de eso. Procuraré aclarar en pocas palabras como entiendo yo esta especie de cruzada contra el propósito del papa argentino de volver al Evangelio, porque ese es, para mí, el auténtico problema.

1º), la Iglesia no es Romana, como he afirmado, ya, en el título. Ya he escrito varias veces que el apelativo de “romana” quiere decir, en la Iglesia, exclusivamente, el rito que emplean algunas Iglesias locales occidentales, que popularmente son llamadas “iglesias católicas apostólicas y romanas”, como en toda América Latina, en contraste con iglesias católicas orientales, que celebran con otros ritos. (Así la Iglesia de Milán podría añadir “…ambrosiana”; o la de Toledo, “…mozárabe”; se trata de ritos católicos diversos al romano). Puede suceder que venga un Papa valiente que actúe como en su tiempo lo hicieron Pedro y Pablo, llevando la sede de la Iglesia al centro del mundo conocido, entonces, Roma; ahora podría ser Nueva York. ¿Por qué no?

2º), así que los romanos se asustan de un papa no romano, ni italiano, -¡encima porteño!-, que se sale del guión de actuación tradicional-secular. Sí, porque no son unos pocos años, se trata de siglos. El mero hecho de vivir en Santa Marta, de calzar zapatos toscos y vulgares, de desdeñar la tradicional cruz dorada pontificia y mantener la sencilla y pobre de hierro, de predicar, y cumplir la pobreza personal; de disponer que el banco Vaticano sea solo eso, un Bnco par ayudar técnicamente a la administración de los bienes de la Iglesia en beneficio de los fieles de todo el mundo, sobre todo los más pobres, y no como máquina y caverna de blanqueo de dinero. Todo eso pone nerviosos a los que durante siglos han identificado Iglesia con la pompa, ostentación, brillo, lujo, elegancia, y poder que se vivían, y derrochaban, en Roma. Porque se deben decir muchos funcionarios vaticanos, o adláteres, periodistas, gente de oficios volcados a la grandeza y magnificencia pontificias, ¿y si ahora el Papa pretende que hagamos todos un giro a la pobreza y a la vida sobria y discreta? Este es, realmente, el miedo de los que con tanto empeño, y a veces, saña, se oponen al Papa.

3º) Es preciso decirlo: durante siglos el Vaticano y su máquina y fuente de poder ha sido, en verdad, un anti-Evangelio. Esto no quiere decir que todos los papas hayan sido nefastos para la Iglesia. Como afirmó hace poco el teólogo español José María Castillo, y a fe que no lo ha hecho en exclusiva, sino que cada vez más teólogos y pensadores cristianos se suman a esa idea, “el problema no es el Papa: es el papado”. Esto quiere decir que si ha habido papas buenos, eficaces y santos, más bien pocos, lo han conseguido a pesar de una estructura que ha sido, desde los siglos V-VI, antievangélica, y poco, o nada, cristiana. Hay en el Nuevo Testamento, (NT), más de 50 enunciados, dichos, sentencias, o enseñanzas de las que, explícitamente, se deduce una clara, rotunda e inexcusable condena del estilo de vida, de práctica del poder, y del abuso de autoridad, que ha significado el mundo vaticano en la Iglesia. Por eso la tentativa seria, cristiana, evangélica y eclesial, del papa Francisco, de volver a los valores evangélicos de verdad, y no con declaraciones rimbombantes, que no cambiaban nada, ni provocaban una metanoia en la Iglesia, tiene tan asustados a los que, además, ven, o intuyen, que como sigan las cosas así, van a perder el inmenso, e ilegítimo poder, que ostentaban. Amén, así sea.

sábado, 20 de junio de 2015

Bienaventurada: la dicha de ser mujer.



Lucas 1:39-56

Quizás algunos no han tenido el placer de poder leer el texto del magníficat de María con otros ojos que no sean considerarlo como un canto más entre muchos. Es posible que algunos hayan pasado la página y solo se hayan detenido en la trama de la historia -algo que considero realmente lamentable si el relato lo releemos con la intención de ignorar el machismo, evitar reivindicar el valor y la posición social de las mujeres, y negar la realidad del feminicidio, un crimen producto del patriarcado que mata a mujeres.

Es sumamente sorprendente descubrir varios aspectos en el texto que incitan a las mujeres –y a los hombres con ellas- a luchar, por la igualdad de género. En mi opinión, se podría hacer una lectura feminista del mismo, en el sentido de que el evangelista podría querer resaltar la elección de Dios de una mujer para formar parte de su plan y la madurez de ella para asumirlo.

Es posible que en el texto nos podamos encontrar con una reivindicación de la mujer, puesto que en el contexto podemos intuir ciertas prohibiciones o violaciones de los derechos, tal y como los entendemos actualmente, por parte de los varones de la época. Situación que nos resulta muy familiar, ya que forma parte de nuestra vida cotidiana a través de los noticieros de todo el mundo.

Me parece vergonzoso que en pleno siglo XXI todavía se vean algunas atrocidades en contra de las mujeres y se siga permitiendo que ellas se conviertan en el blanco de violencias y abusos –algo absolutamente reprobable para nuestras sociedades modernas.

Resulta incomprensible que, debido al machismo imperante, no se entienda la libertad de todos los seres humanos y se ignore, por tanto, la manipulación, el control, el abuso sexual, y la violencia hasta la muerte de una persona a la que se considera como una propiedad. Se debe reconocer que la violencia de género ha sido reproducida, patentada y legitimada por canciones o géneros musicales, predicaciones en templos cristianos y no cristianos, por no hablar de padres “súper”-heterosexuales, controladores del hijo/hija, intentando que no se “desvié”, tome malas decisiones o condicionando ambientes sociales –diría yo- profundamente disfuncionales, a pesar de representar “relaciones normativas” que, al mismo tiempo, alimentan un profundo “híper”-machismo.

Por tanto, cuando me enfrento al texto en cuestión, me llama profundamente la atención el hecho de que siempre se discuta el tema de María, la madre de Jesús, solo desde un aspecto teológico centrado en su sexualidad: su virginidad, su castidad, su santidad. Aspectos que, aparte de las diferentes opiniones encontradas, no son demasiado importantes. Yo prefiero encontrar en este texto a María desde otro lado de su feminidad y de su lucha en un contexto en el que las mujeres no tenían voz. Es indiscutible que el Magnificat es un canto de denuncia a favor de los desfavorecidos y desfavorecidas, producto del sistema patriarcal imperante.

Desde este punto de vista, el texto nos confirma una noticia que anuncia que el salvador de todos los desfavorecidos nacería a través de María, cuya veracidad sería ratificada a través de su parienta Elizabeth, ya en su sexto mes de embarazo. Ella no se resistió a comprobarlo, y el texto nos dice que “levantándose María, fue de prisa a la montaña, a una ciudad de Judá”. No vamos a hacer especulaciones que no vienen al caso, pero sí me gustaría proponer que tal vez, y de forma hiperbólica, el autor quiera resaltar que, al recibir la noticia del embarazo de Elisabeth, María se puso inmediatamente en marcha como alguien que se sitúa fuera de las convenciones sociales; esas que obligaban a las mujeres a vivir bajo la autoridad o tutela de un varón, ya fuera éste su esposo, su hermano o su padre, que velaría por su seguridad.

Si aceptamos las hipótesis que se han planteado, tal vez deberíamos considerar que nuestro autor nos está proponiendo de alguna forma que María nos muestra su feminidad actuando como una mujer autónoma que toma sus propias decisiones, lo cual nos lleva a la conclusión de que las mujeres son y deben ser precisamente eso, seres autónomos (V.39).

Las decisiones de María llevarían a José a desconfiar de ella –algo normal para una época extremadamente patriarcal- lo cual se intuye en el sueño de José y en la visión del ángel que se le aparece para tranquilizarle.

En este momento, me gustaría volver a resaltar esa “prisa” de la que habla el autor para relacionarla con una mujer que es capaz de tomar una decisión sin que para ello necesite la aprobación de un varón, algo que podría resultar muy difícil para ambas partes. No podemos ignorar que hay algunas mujeres que tienden a ser co-dependientes del voto, decisión o punto de vista del hombre, así como también reconocemos la tendencia de otras a actuar y pensar con total independencia. Esto no quiere decir que hombres y mujeres no intenten por todos los medios establecer un diálogo honesto y sincero, o incluso que se nieguen a agradarse las unas a los otros en una relación, sea esta la que sea. Lo que pretendo comunicar es que, para mí, son inaceptables las razones que esgrime el sistema patriarcal para justificar un comportamiento que conlleva una situación de riesgo para las mujeres. Afirmaciones como “la mujer es poco racional y no puede tomar buenas decisiones por ella misma”, pueden llevarnos a situaciones discriminatorias y anacrónicas. Actualmente, las mujeres están capacitadas para vivir su propia vida y a tomar sus propias decisiones, ya sean casadas o no, con pareja o sin ella.

María se quedó tres meses en casa de su pariente y con ello nos muestra, creo yo, su capacidad de decisión, su valentía para asumir una denuncia al patriarcado de su tiempo y su disposición absoluta, como mujer, a la misión que Dios le había encomendado.

Esta disposición de María a llevar a cabo la voluntad de Dios está relacionada con otro aspecto que me gustaría destacar de su feminidad, a saber, que estoy convencido de que cualquier mujer, desde su diversidad femeninam comparte autoridad y responsabilidad espiritual con cualquier hombre en la misión de Dios, es decir que la mujer está al mismo o igual nivel de condición para comunicarse con Dios que cualquier hombre (V.41-42).

Dios no es machista, lo que quiere decir que no se comunica más con hombres y menos con mujeres; no se compromete más con los hombres que con las mujeres para llevar a cabo su misión. Las mujeres no necesitan intermediarios para tener una relación directa con Dios. Esto quiere decir que Dios puede usar a cualquier mujer como instrumento en cualquier circunstancia, desarticulando el argumento fascista y patriarcal de que las mujeres son inútiles para ciertas labores, puesto que sus habilidades están básicamente relacionadas con las labores domésticas. Nos equivocamos si pensamos que las mujeres están incapacitadas para tal o cual asunto, porque lo cierto es que ellas pueden hacer y ser lo que deseen hacer y ser.

Nuestras iglesias deberían reconocer que no se trata de dar una cierta participación a las mujeres como una muestra de integración o modernidad, de lo que se trata es de reconocer y practicar la igualdad en todos los aspectos y ministerios. Debemos reconocer que Dios no le dio poder a José, sino a María.

También y al mismo tiempo, este texto (V.43-45) podría estar animándonos a deconstruir las concepciones hetero-patriarcales del cuerpo y de la reproducción en términos de género. A María se le anuncia que va a ser madre, pero no como un indicador de su feminidad, de su función social o de la utilidad de su cuerpo, sino más bien como una reivindicación de su ser persona y de su valor aparte de cualquier convención social, cultural o religiosa. Ante todo, este texto nos anima a rechazar cualquier tipo de discriminación.

En la actualidad, muchos de los lugares públicos a los que asistimos para divertirnos o para conocer a otras personas se convierten en verdaderos “concursos de belleza”. Se juzga qué personas son guapas y cuales no, con lo cual se sobrevalora a unas y se humilla a otras. Tal vez, la masculinidad no tenga que ver con ese menosprecio reiterado a las mujeres consideradas por los diferentes cánones de belleza como no deseables. Las mujeres son personas, no cuerpo y, por tanto, deben ser consideradas por lo que son y no por su aspecto. Su empoderamiento debe basarse en sus capacidades y no en sus curvas.

Y termino concluyendo que la María que nos muestra el evangelista Lucas es una mujer que canta a la esperanza y a la vida, a la igualdad y a la justicia, y por eso creo que la mujer debe cumplir su papel profético en la denuncia de sus propias violaciones para convertirse en un agente social y espiritual en la defensa de los derechos de todos los seres humanos. Este canto representa la entrega y la preocupación por los desfavorecidos sean estos quienes sean y afirma que las mujeres también son agentes de fe y espiritualidad a través de su compromiso en la consecución de un mundo mejor. María impulsa a miles de mujeres, ayer, hoy y siempre a recordar su verdadera situación, y a luchar por su empoderamiento ante las injusticias sociales, culturales y religiosas de género.

Adolfo Céspedes Maestre

Nace el 21 de octubre de 1989 en Barranquilla, Colombia. Teólogo profesional de la universidad Reformada en Barranquilla. Estudiante de Maestría en Psicología (investigativa) de la universidad del Norte de Barranquilla, Colombia. Dedicado actualmente a la educación religiosa en primaria, básica y media, y a la docencia en instituciones religiosas, iglesias y comunidades sociales.